lunes, 11 de octubre de 2010

Un radical más


La presencia de Ricardo Alfonsín por donde quiera que vaya tiene la virtud de hacer aflorar las mejores tradiciones de la práctica política, hablo de mística, de pasión, de fervor militante y fundamentalmente de estimular la participación.

Alguna vez, mientras lo escuchaba, llegué incluso a hacer el ejercicio de cerrar los ojos y directamente me remontó a quien hizo incursionar, en la década de los ochenta, a miles de jóvenes con su prédica a las lides de la política, hablo del siempre bien recordado Raúl Alfonsín.

Por eso suelo decir que es invalorable el aporte que hace Ricardo al centenario partido porque apuesta al fortalecimiento partidario, a reconstituír la affectio societatis entre los radicales, aspectos fundamentales para poder arribar a la cohesión partidaria que hace falta.

Ahora bien cabe decir, en las fronteras de lo políticamente incorrecto dentro del centenario partido, que hay dos cuestiones que contrastan con lo precedentemente expuesto y esto es a partir de dos definiciones que suele formular, a saber “soy un socialista más” y “el Frente Progresista en Santa Fe es un ejemplo que queremos extender a todo el país”.

Partiendo de la premisa que esa autodefinición constituye una sobreactuación, un exceso de galantería, no se sabe si hacia el gobernador o hacia el Partido Socialista, dicho donde esta fuerza política tiene predicamento no deja de erigirse en toda una provocación para los radicales de Rosario y de la provincia de Santa Fe, por razones que serían motivo de otro análisis y que evidentemente el ilustre visitante desconoce.

En cuanto a la reivindicación que formula del Frente Progresista simplemente diré que por el destrato hacia los radicales que caracterizó a dicha construcción política, esa definición cuanto menos amerita ser revisada, máxime cuando el Presidente del partido en la provincia lo caracteriza como Frejuli o el Intendente de la ciudad de Santa Fe a casi tres años de gestión demanda la institucionalización de dicha coalición, salvo que a eso se aspire para el partido en el orden nacional.

En nuestra provincia hay una estrategia partidaria definida que apuesta a que sean radicales quienes lideren la construcción política frentista y a las que entiendo las figuras nacionales deberían allanarse, por eso para otras incursiones con solo decir “soy un radical más” sería un aporte invalorable.