domingo, 12 de octubre de 2008
Illia
El gobierno de Arturo Illia duró menos de mil días. Arturo Illia encontró un país que se sentía derrotado, abrumado; que descreía de las promesas; que desconfiaba de los mecanismos de la democracia; que tendía a suponer que las palabras eran distintas de los hechos. Encontró un país estafado, o que se sentía estafado; un sindicalismo rencoroso; sectores hegemónicos del mundo económico y financiero que lo veían como enemigo potencial: una conducción militar que lo imaginaba hostíl.
Y Arturo Illia, con un estilo increíblemente ajeno a las espectacularidades y las vanaglorias, recuperó la economía, impulso la cultura hasta permitir que las universidades alcanzaran prestigio internacional, defendió con pasión la soberanía frente a todas las presiones, mantuvo una honradez inmaculada desde el primero hasta el último día pero, por mucho tiempo, no logró el reconocimiento de la mayoría de los argentinos. Y esto debe ser reconocido: no estaba en él, en su forma de vivir y de gobernar, directa y simple, utilizar los encandilamientos de la propaganda o las manipulaciones de la acción psicológica; no estaba en él, tampoco, detener a tiempo a los conspiradores que hundirían a la república en la noche más negra de su historia; no estaba en él hacer nada –excepto gobernar ejemplarmente- para conquistar el apoyo mayoritario y el reconocimiento de los sectores.
El gobierno de Arturo Illia permitió que el peronismo se presentara a elecciones en todos los distritos, anulando las proscripciones y cualquier tipo de medida discriminatoria.
Nunca le perdonaron al gobierno de Arturo Illia la defensa de la soberanía nacional, realizada en todos los terrenos y todos los días, sin entrar jamás en combinación con logias extrañas.
Illia, como Hipólito Yrigoyen, partió de la dignidad nacional, que no implicó aislacionismo sino la integración en el mundo desde una perspectiva nacional.
A 45 años de la asunción del Dr. Arturo Umberto Illia en el cargo de Presidente Constitucional de la República Argentina, haciendo propios algunos fragmentos del libro de Raúl Alfonsín “Qué es el radicalismo” vaya el merecido homenaje a Don Arturo.
http://www.youtube.com/watch?v=arJ_4Rv1xmE
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario