INSTRUCCIONES PARA PERDERSE EN UN DESIERTO
(en una tarde Cortazariana)
Sitúese en medio de la duna, donde se advierte la parte en la que da el sol, a fin de recibir el máximo calor en el cuello.
Esto aumentará proporcionalmente su desesperación por encontrar un oasis, o una civilización perdida donde vivir aventuras y sentar la cabeza como héroe.
A ser posible, antes de embarcarse por los paisajes de dunas, fortalezca sus músculos en algún gimnasio de la capital.
De esta manera, cuando esté perdido, usted estará acostumbrado a ingerir grandes cantidades de agua, y esto aumentará potencialmente las posibilidades de ser un auténtico moribundo con una cantimplora diminuta de agua.
Para que el efecto de pérdida sea pleno, acuda a su oculista antes de efectuar esta actividad, y realice un test especial que le permita ver oasis o vergeles en circunstancias adversas.
Por último, elija usted una hora donde el azul del cielo sea eléctrico y el sol dé de pleno en la inmensidad arenosa donde se encuentra.
Si ha cumplido todos estos requisitos y no ve nada civilizado en, digamos, muchas dunas a la redonda, enhorabuena, está usted perdido. Sólo le queda sobrevivir y ser un héroe, o morir y que todos le lloren.
No hay comentarios:
Publicar un comentario