A través de la publicación “El
14 bis”, la militancia sindical que abrevaba en las mejores tradiciones del
viejo tronco radical dejaba su marca, trascendiendo incluso los límites del
centenario partido fundado por Leandro Alem e Hipólito Yrigoyen.
En la inteligencia de que un
partido sin anclaje social no tiene futuro, apostamos fuerte a sumar al
accionar político de la Organización de Trabajadores Radicales de Rosario la
palabra escrita, ello en formato de boletín para poder replicar nuestro mensaje,
nuestra propuesta.
Era el inicio del tercer
milenio, lejos del formidable desarrollo de las herramientas que hoy brinda
internet y con un trabajo artesanal incansable recuerdo la edición de lo que seguimos
considerando aún todo un orgullo y no era para menos el hecho de poder contar
con un espacio en donde poder exteriorizar nuestras posiciones políticas.
Así, el Negro Riofrío, Roberto
Mandato, Luis Mosto y quien suscribe convocando, colectando recursos, papel,
pidiendo de favor el uso de cuanta fotocopiadora se nos cruzara en el camino, mí
querido hermano Antonio diagramando, siempre a contrareloj, o el resto de los integrantes de la organización
(Lucía Rosso, Cecilia Tedeschi, Juan Pesce, Rita Montiel, Mónica Terrazino, Henry
Ciraolo, Cristina Fernandez Torres, Manuela Velo, Víctor Morresi, Pedro
Segovia, Angelito Valor, Marcelo Sosa, Carlos Loza, el Gringo Ferullo, Catalina
Comparetto, Dalia Roa, Julio Ortíz, Indelicato, Isabel Vicentín, y tantos otros
compañeros correligionarios) participando activamente en la distribución de El 14 Bis.
El 14 bis fue el producto de
horas de reuniones, de discusiones, de litros de café o mate, de humaredas de
cigarrillos, en la vieja casona de calle Paraguay (Comité Departamental de la
UCR Rosario), en distintos sindicatos e incluso en bares donde despuntar el
disfrute de la militancia política.
Con mirada en perspectiva, esa
publicación, ese accionar, esos encuentros fueron fundamentalmente espacios de
confraternidad de hombres y mujeres que abrazaban y abrazan el ideario radical,
pero también y fundamentalmente de iniciación y de transmisión de la praxis política
sindical.
Vaya entonces en estas líneas
un sentido reconocimiento a los protagonistas de ese órgano de prensa que llegó
a constituirse en toda una referencia en ámbitos partidarios y sindicales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario